sábado, 26 de marzo de 2011

ES TIEMPO DE INCIENSO.

Que Dios ha abierto la puerta
y nosotros las ventanas,
que ha vuelto la primavera
a colarse en las estancias.
Es el tiempo del incienso
y de la limpieza de plata,
de los sones de cornetas
en los ensayos de bandas.
Es tiempo de Vía Crucis
y de cuadrillas que ensayan,
de los carteles de cultos
y racheo de alpargatas.

Tiempo de los cabildos
que por la noche se alargan,
de dos amigos que se cruzan
y de cofradías charlan.
Porque es tiempo de encontrar
por el Postigo o la Plaza
en la Alameda o en el atrio
de las Madres Mercedarias,
a un Hombre de tez morena
que por las calles avanza
y Fuentes entero busca
las huellas de sus pisadas.

Luz de cirios, olor a flores
la Cuaresma nos regala,
cuando va llegando a su fin
un pueblo que se engalana:
Con un costal y una faja,
con uniformes de banda,
con capirotes y capas,
con ciriales, con dalmáticas,
con ramas de olivo y palmas.

Que Dios ha abierto la puerta
y nosotros, las ventanas,
y Fuentes se hace oración
que corre en brisa temprana.
Solo ocho días nos separan
solo una semana falta
que repiquen las campanas,
porque Fuentes por nosotros
estrena Semana Santa.

Del Pregón de Francis J. González
de la Semana Santa de Fuentes de Andalucía 2008.
















viernes, 25 de marzo de 2011

¿DE VERDÁD MURIÓ JESÚS EN LA CRUZ?...

LA CRUZ es uno de los símbolos religiosos más conocidos y venerados del mundo, pues millones de personas la consideran el instrumento sagrado en el que se ejecutó a Jesus, La cruz ha recibido un culto parecido, si no igual, al de Cristo; el sagrado madero se ha reverenciado casi tanto como a Dios”.




Hay quienes dicen que la cruz los acerca a Dios cuando oran; otros la usan a modo de amuleto contra el mal. Ahora bien, ¿deberían los cristianos venerarla? ¿De verdad murió Jesús en ella?




Mucho antes de comenzar la era cristiana, las cruces eran símbolos utilizados por los antiguos babilonios en el culto a Tamuz, dios de la fertilidad. Su uso se extendió con el tiempo a Egipto, la India, Siria y China. Con el paso de los siglos, los israelitas contaminaron la adoración de Jehová con diversos rituales en honor del dios falso Tamuz.  Los Evangelios de Mateo, Marcos, Lucas y Juan emplean el vocablo griego staurós para referirse al instrumento en el que fue ejecutado Jesús Dicho término alude a un poste, palo o madero vertical   “En ninguno de los numerosos escritos del texto griego original del Nuevo Testamento encontramos una sola oración que indique, ni siquiera de manera indirecta, que el staurós usado en el caso de Jesús fuera distinto del habitual, y mucho menos que estuviera formado por dos maderos clavados juntos en forma de cruz, en vez de por uno solo”.



El apóstol Pedro empleó la palabra xýlon (literalmente “palo”) como sinónimo destaurós, lo cual da a entender que se trataba de un simple poste o madero vertical, y no de un madero con un travesaño. No fue sino hasta unos tres siglos después de morir Jesús cuando algunos miembros de la cristiandad empezaron a promover la idea de que Cristo murió en una cruz. Sin embargo, esta creencia se basaba en la tradición y en un mal uso del término griego staurós. Hay que destacar también que en ciertos dibujos antiguos de ejecuciones romanas se ve un poste sencillo o tronco.




Sin embargo, algo que debería interesar todavía más a los cristianos es determinar si es apropiado o no venerar el instrumento con el que se mató a Jesús. Ya fuera un madero de tormento simple, una cruz, una flecha, una lanza o un cuchillo, ¿debería venerarse?
Imagínese que asesinaran brutalmente a un ser querido y se presentara ante un tribunal el arma homicida como prueba. ¿Trataría usted de recuperarla para tomarle fotografías, imprimir copias y luego distribuirlas? ¿Haría réplicas del arma en varios tamaños? ¿Modificaría algunas para usarlas a modo de joya? ¿O encargaría reproducciones para que sus amigos y familiares las compraran y las veneraran? De seguro, tan solo pensarlo le provocaría repulsión. Pues bien, eso es precisamente lo que se ha estado haciendo con la  crúz.




domingo, 13 de marzo de 2011

ANTES DE SALIR SE NECESITA MUCHOS ENSAYOS...

Tengo una parte del alma,
por la noche en casa sola,
que se queja cuando escucha,
por Noviembre carnaval.

Tengo una parte del alma,
una flor de primavera,
que se adormece a mi espera,
“sentaita” en el sofá.

Quien me llena de moral,
si el ensayo salió mal,
siempre está a mi vera,
mi novia o mi mujer,
de la que suelo aprender,
la que a mi me consuela.

Ya siento el calor,
el de mis Remes, el de mi Conchi, el de mi Pastora,
ya siento el calor,
el de mi Adela, el de mis Anas o el de mi Aurora,
Antonia, ¡ay! mi Antonia.

Ensayo en una cochera “adorná”,
por mi disfraz de cada año,
donde comparto sueños con mi Antonio,
mi Guillermo y mi Alejandro.

Una abuela me sigue a donde voy yo,
bendita sea mi Nati su devoción.

Un amor que me serena,
el viernes de carnavales,
es la misma que se esmera,
me perfila los detalles.

El amor de mi mujer es un tesoro,
yo no se bien cuanto vale.